Magdaley
contreras
Mercadeo
en Salud Pública
En el terreno de la gestión de los servicios
de salud pública, los modelos alternativos son limitados. Podemos hablar de la
creación de mercados reales, de la provisión pública directa desde la
administración, o de formas mixtas relacionadas con la creación de mercados
simulados.
El
establecimiento de entornos de «mercado real» implica el pago por servicio, la
capacidad de elección y, consecuentemente, la libre competencia entre
proveedores privados. En salud pública ha habido algunas experiencias, totales
o parciales, de establecimiento de mercados reales con nefastas consecuencias.
Al hablar de bienes públicos y casi públicos hemos visto la práctica
inexistencia de incentivos para la producción de servicios por parte del sector
privado, al ser muy difícil repercutir los gastos en forma de precios sobre los
clientes. La denominada «paradoja de Rose» comporta la dificultad para el
potencial cliente de valorar la utilidad que puede comportarle la adquisición
de un determinado servicio de salud pública, al no repercutirle necesariamente
de forma individual, en términos de salud, el beneficio de la acción o el
servicio. En el mismo terreno económico, la gran elasticidad de los servicios
de salud pública (relación entre la variación de demanda de un bien y su precio),
que en la práctica se comportan como bienes de lujo (a más precio, menor
demanda), hace que no sea recomendable su planteamiento desde un punto de vista
de mercado puro, ya que, por otra parte, los servicios de salud pública en
general son los que, en el entorno sanitario, presentan un mejor cociente de
coste-efectividad y por tanto son más eficientes.
La
dificultad que generalmente comporta la objetivación en los servicios de salud
pública supone una dificultad añadida para el establecimiento de precios, y en
el mismo sentido, el predominio del medio y largo plazo en el resultado de sus
acciones dificulta la reversión de las inversiones.
Las
consideraciones éticas tienen un peso importante como para sustraer del mercado
puro a los servicios de salud pública. Aspectos propios de la salud pública,
como la confidencialidad de sus actuaciones y registros, la autoridad sanitaria
y la coerción cuando es necesario, o las acciones de políticas tutelares
asimétricas, dirigidas a corregir o limitar el comportamiento individual, así
como la prioridad del interés común sobre el individual, no son, en forma
alguna, delegables en el mercado (Pacheco, 2012).
La
Carta de Ottawa (1986) surge de una profunda reflexión crítica sobre la salud
pública, reconociendo los factores sociales y ambientales, e incluyendo los
estilos de vida como elementos fundamentales de la promoción de la salud. Su
influencia ha sido significativa a la teoría de la salud pública en la Región,
contribuyendo al cambio del paradigma biológico de la salud y creando las bases
para el entendimiento profundo de los determinantes sociales de la salud.
CARTA
DE OTTAWA PARA LA PROMOCION DE LA SALUD
La Primera Conferencia Internacional sobre la
Promoción de la Salud reunida en Ottawa el día 21 de noviembre de 1986 emite la
presente CARTA dirigida a la consecución del objetivo "Salud para Todos en
el año 2.000." Esta conferencia fue, ante todo, una respuesta a la
creciente demanda de una nueva concepción de la salud pública en el mundo. Si
bien las discusiones se centraron en las necesidades de los países
industrializados, se tuvieron también en cuenta los problemas que atañen a las
demás regiones. La conferencia tomó como punto de partida los progresos
alcanzados como consecuencia de la Declaración de Alma Ata sobre la atención
primaria, el documento " Los Objetivos de la Salud para Todos" de la
Organización Mundial de la Salud, y el debate sobre la acción intersectorial
para la salud sostenido recientemente en la Asamblea Mundial de la Salud. (OMS, 1988)
PROMOCIONAR
LA SALUD
La
promoción de la salud consiste en proporcionar a los pueblos los medios
necesarios para mejorar su salud y ejercer un mayor control sobre la misma.
Para alcanzar un estado adecuado de bienestar físico, mental y social un
individuo o grupo debe ser capaz de identificar y realizar sus aspiraciones, de
satisfacer sus necesidades y de cambiar o adaptarse al medio ambiente. La salud
se percibe pues, no como el objetivo, sino como la fuente de riqueza de la vida
cotidiana. Se trata por tanto de un concepto positivo que acentúa los recursos
sociales y personales, así como las aptitudes físicas. Por consiguiente, dado
que el concepto de salud como bienestar transciende la idea de formas de vida
sanas, la promoción de la salud no concierne exclusivamente al sector
sanitario. (OMS, 1988)
PREREQUISITOS
PARA LA SALUD
Las
condiciones y requisitos para la salud son: la paz, la educación, la vivienda,
la alimentación, la renta, un ecosistema estable, la justicia social y la
equidad. Cualquier mejora de la salud ha de basarse necesariamente en estos prerrequisitos.
PROMOCIONAR
EL CONCEPTO
Una
buena salud es el mejor recurso para el progreso personal, económico y social y
una dimensión importante de la calidad de la vida. Los factores políticos,
económicos, sociales, culturales, de medio ambiente, de conducta y biológicos
pueden intervenir bien en favor o en detrimento de la salud. El objetivo de la
acción por la salud es hacer que esas condiciones sean favorables para poder
promocionar la salud (OMS, 1988).
PROMOMOCIONAR
LOS MEDIOS
La
promoción de la salud se centra en alcanzar la equidad sanitaria. Su acción se
dirige a reducir las diferencias en el estado actual de la salud y a asegurar
la igualdad de oportunidades y proporcionar los medios que permitan a toda la
población desarrollar al máximo su salud potencial. Esto implica una base firme
en un medio que lo apoye, acceso a la información y poseer las aptitudes y
oportunidades que la lleven a hacer sus opciones en términos de salud. Las
gentes no podrán alcanzar su plena salud potencial a menos que sean capaces de
asumir el control de todo lo que determina su estado de salud. Esto se aplica
igualmente a hombres y mujeres.
ACTUAR
COMO MEDIADOR
El
sector sanitario no puede por sí mismo proporcionar las condiciones previas ni
asegurar las perspectivas favorables para la salud y, lo que, es más, la
promoción de la salud exige la acción coordinada de todos los implicados: los
gobiernos, los sectores sanitarios y otros sectores sociales y económicos, las
organizaciones benéficas, las autoridades locales, la industria y los medios de
comunicación. Las gentes de todos los medios sociales están implicadas en tanto
que individuos, familias y comunidades.
A
los grupos sociales y profesionales y al personal sanitario les corresponde
especialmente asumir la responsabilidad de actuar como mediadores entre los
intereses antagónicos y a favor de la salud. Las estratégicas y programas de
promoción de la salud deben adaptarse a las necesidades locales y a las
posibilidades específicas de cada país y región y tener en cuenta los diversos
sistemas sociales, culturales y económicos (OMS, 1988).
LA
PARTICIPACION ACTIVA EN LA PROMOCION DE LA SALUD IMPLICA: LA ELABORACION DE UNA
POLITICA PUBLICA SANA.
Para
promover la salud se debe ir más allá del mero cuidado de la misma. La salud ha
de formar parte del orden del día de los responsables de la elaboración de los
programas políticos, en todos los sectores y a todos los niveles, con objeto de
hacerles tomar conciencia de las consecuencias que sus decisiones pueden tener
para la salud y llevarlos así a asumir la responsabilidad que tienen en este
respecto.
La
política de promoción de la salud ha de combinar enfoques diversos. Si bien
complementarios, entre los que figuren la legislación, las medidas fiscales, el
sistema tributario y los cambios organizativos. Es la acción coordinada la que
nos lleva a practicar una política sanitaria, de rentas y social que permita
una mayor equidad.
La
acción conjunta contribuye a asegurar la existencia de bienes y servicios sanos
y seguros, de una mayor higiene de los servicios públicos y de un medio
ambiente más grato y limpio. La política de promoción de la salud requiere que
se identifiquen y eliminen los obstáculos que impidan la adopción de medidas
políticas que favorezcan la salud en aquellos sectores no directamente
implicados en la misma. El objetivo debe ser conseguir que la opción más
saludable sea también la más fácil de hacer para los responsables de la
elaboración de los programas. (OMS, 1988)
LA
CREACION DE AMBIENTES FAVORABLES
Nuestras
sociedades son complejas y están relacionadas entre si de forma que no se puede
separar la salud de otros objetivos. Los lazos que, de forma inextricable, unen
al individuo y su medio constituyen la base de un acercamiento socio-ecológico
a la salud. El principio que ha de guiar al mundo, las naciones, las regiones y
las comunidades ha de ser la necesidad de fomentar el apoyo recíproco, de
protegernos los unos a los otros, así como a nuestras comunidades y nuestro
medio natural. Se debe poner de relieve que la conservación de los recursos
naturales en todo el mundo es una responsabilidad mundial. El cambio de las
formas de vida, de trabajo y de ocio afecta de forma muy significativa a la
salud. El trabajo y el ocio deben ser una fuente de salud para la población. El
modo en el que la sociedad organiza el trabajo debe contribuir a la creación de
una sociedad saludable. La promoción de la salud genera condiciones de trabajo
y de vida gratificantes, agradables, seguras y estimulantes.
Es
esencial que se realice una evaluación sistemática del impacto que los cambios
del medio ambiente producen en salud, particularmente en los sectores de la
tecnología, el trabajo, la energía, la producción y el urbanismo. Dicha
evaluación debe ir acompañada de medidas que garanticen el carácter positivo de
los efectos de esos cambios en la salud pública. La protección tanto de los
ambientes naturales como de los artificiales, y la conservación de los recursos
naturales, debe formar parte de las prioridades de todas las estrategias de
promoción de la salud (OMS, 1988).
EL
REFORZAMIENTO DE LA ACCION COMUNITARIA
La promoción
de la salud radica en la participación efectiva y concreta de la comunidad en
la fijación de prioridades, la toma de decisiones y la elaboración y puesta en
marcha de estrategias de planificación para alcanzar un mejor nivel de salud.
La fuerza motriz de este proceso proviene del poder real de las comunidades, de
la posesión y de control que tengan sobre sus propios empeños y destinos.
El
desarrollo de la comunidad se basa en los recursos humanos y materiales con que
cuenta la comunidad misma para estimular la independencia y el apoyo social,
así como para desarrollar sistemas flexibles que refuercen la participación
pública y el control de las cuestiones sanitarias. Esto requiere un total y
constante acceso a la información y a la instrucción sanitaria, así como a la
ayuda financiera (OMS, 1988).
EL
DESARROLLO DE LAS APTITUDES PERSONALES
La
promoción de la salud favorece el desarrollo personal y social en tanto que
proporcione información educación sanitaria y perfeccione las aptitudes
indispensables para la vida. De este modo se incrementan las opciones
disponibles para que la población ejerza un mayor control sobre su propia salud
y sobre el medio ambiente y para que opte por todo lo que propicie la salud. Es
esencial proporcionar los medios para que, a lo largo de su vida, la población
se prepare para las diferentes etapas de la misma y afronte las enfermedades y
lesiones crónicas.
Esto
se ha de hacer posible a través de las escuelas, los hogares, los lugares de
trabajo y el ámbito comunitario, en el sentido de que exista una participación
activa por parte de las organizaciones profesionales, comerciales y benéficas,
orientada tanto hacia el exterior como hacia el inferior de las instituciones
mismas.
LA
REORIENTACION DE LOS SERVICIOS SANITARIOS
La
responsabilidad de la promoción de la salud por parte de los servicios
sanitarios la comparten los individuos particulares, los grupos comunitarios,
los profesionales de la salud, las instituciones y servicios sanitarios y los
gobiernos. Todos deben trabajar conjuntamente por la consecución de un sistema
de protección de la salud. El sector sanitario debe jugar un papel cada vez
mayor en la promoción de la salud de forma tal que trascienda la mera
responsabilidad de proporcionar servicios clínicos y médicos. Dichos servicios
deben tomar una nueva orientación que se sensible a las necesidades culturales
de los individuos y las respete.
Asimismo,
deberán favorecer la necesidad por parte de las comunidades de una vida más
sana y crear vías de comunicación entre el sector sanitario y los sectores
sociales, políticos y económicos. La reorientación de los servicios sanitarios
exige igualmente que se preste mayor atención a la investigación sanitaria, así
como a los cambios en la educación y la formación profesional. Esto
necesariamente ha de producir un cambio de actitud y de organización de los
servicios sanitarios de forma que giren en torno a las necesidades del
individuo como un todo (OMS, 1988).
IRRUMPIR
EN EL FUTURO
La
salud se crea y se vive en el marco de la vida cotidiana: en los centros de
enseñanza, de trabajo y de recreo. La salud es el resultado de los cuidados que
uno se dispensa así mismo y a los demás, de la capacidad de tomar decisiones y
controlar la vida propia y de asegurar que la sociedad en que uno vive ofrezca
a todos sus miembros la posibilidad de gozar de un buen estado de salud. El
cuidado del prójimo, así como el planteamiento holístico y ecológico de la
vida, son esenciales en el desarrollo de estrategias para la promoción de la
salud. De ahí que los responsables de la puesta en práctica y evaluación de las
actividades de promoción de la salud deban tener presente el principio de la
igualdad de los sexos en cada una de las fases de planificación.
EL
COMPROMISO A FAVOR DE LA PROMOCION DE LA SALUD
Los
participantes en esta conferencia se comprometen:
- Intervenir en el terreno de la política de la salud pública y a abogar en favor de un compromiso político claro en lo que concierne a la salud y la equidad en todos los sectores.
- Oponerse a las presiones que se ejerzan para favorecer los productos dañinos, los medios y condiciones de vida malsanos, la mala nutrición y la destrucción de los recursos naturales.
- Así mismo se comprometen a centrar su atención en cuestiones de salud pública tales como la contaminación, los riesgos profesionales, la vivienda y la población de regiones no habitadas.
- A eliminar las diferencias entre las distintas sociedades y en el interior de las mismas, y a tomar medidas contra las desigualdades, en términos de salud, que resultan de las normas y prácticas de esas sociedades.
- A reconocer que los individuos constituyen la principal fuente de salud.
- A apoyarlos y capacitarlos a todos los niveles para que ellos y sus familiares y amigos se mantengan en buen estado de salud: del mismo modo se comprometen a aceptar que la comunidad es el portavoz fundamental en materia de salud, condiciones de vida y bienestar en general.
- A reorientar los servicios sanitarios y sus recursos en términos de la promoción de la salud; a compartir el poder con otros sectores, con otras disciplinas y, lo que es aún más importante, con el pueblo mismo.
- A reconocer que la salud y su mantenimiento constituyen la mejor meta e inversión posibles y a tratar de la cuestión ecológica global que suponen nuestra forma de vida. La conferencia insta a todas las personas interesadas-formar una fuerte alianza en favor de la salud (OMS, 1988).
LLAMADA
A LA ACCION INTERNACIONAL
La
Conferencia llama a la Organización Mundial de la Salud y a los demás
organismos internacionales a abogar en favor de la salud en todos los foros
apropiados y a dar apoyo a los distintos países para que se establezcan
programas y estrategias dirigidas a la promoción de la salud. La Conferencia
tiene el firme convencimiento de que, si los pueblos, las organizaciones
gubernamentales y no gubernamentales, la Organización Mundial de la Salud y
todos los demás organismos interesados unan sus esfuerzos en torno a la
promoción de la salud y en conformidad con los valores sociales y morales
inherentes a esta CARTA, el objetivo "Salud para Todos en el año 2,000"
se hará realidad (OMS, 1988).
Este es un buen instrumento para encaminar a nuestros dirigentes al debate sobre realidad de la salud pública que la población en general necesitamos. Pero el reto para lograr mejorar o cambiar la realidad actual requiere de objetivos más claros para el desarrollo de nuevas y mejores políticas de salud y que evalúen más a fondo las partes socioeconómicas que afectan directamente a la población es decir lo que afecta realmente a un individuo, en cuanto a riegos ambientales y su entorno.
ResponderEliminarMuy interesante este artículo, ya que es una necesidad la creación de políticas de salud sanas con la finalidad de mejorar la equidad y accesibilidad de los servicios de salud.. Además tomando la promoción de salud desde la orientación y participación comunitaria.
ResponderEliminarEs un buen articulo ya que con estas políticas de salud se pueda brindar un mejor servicio para todos e integrarlos a los programas de salud que presente nuestro pais.
ResponderEliminarLo interesante de la carta de Ottawa es que esta reunión permitió que estos países dejaran de ver como el todo a una persona, y reconocer que habían otros determinantes que involucraban grupos de personas en cuanto a la salud., como la calidad de vida, la disponibilidad de los servicios de salud, el estado de nutrición en los niños, factores y entornos económicos, sociales y culturales, etc.
ResponderEliminarFue una llamada de atención y a la acción internacional, ya que había que darle la lucha a las desigualdades, además a dar apoyo a los distintos países para que se establezcan programas y estrategias dirigidas a la promoción de la salud.
Y, muy importante que nos ayuda a reflexionar y trabajar en promoción y prevención para en bienestar de las personas en el mundo.
Me parece que es interesante, este artículo.porque en un futuro puede ayudar, a mejorar en cuanto al área de atención de salud.
ResponderEliminarAyuda concientizar a la población sobre el control de su propia salud, definiendo así unos requisitos básicos para la salud como paz, educación, vivienda, alimentación, renta, un ecosistema estable, justicia social y equidad. Me parece un excelente articulo
ResponderEliminarMe parece interesante y muy viable este articulo para que en un futuro se pueda aplicar para mejorar muchas perspectivas de la salud y asi tenwr mas exito en la calidad y eficiencia del servicio que se presta. Esta carta Ottawa nos abre nuevos horizontes y nos pone a ser mas observadores de que si es posible hacer mejoras para obtener buenos resultados.
ResponderEliminarEste es un excelente método para la promoción de la salud
ResponderEliminarNos ayuda a pensar y al mismo tiempo a razonar para utilizar mejores métodos y tener mejores resultados
Me parece importante sobre todo me llamo aun mas la atención de crear entornos saludables porque en nuestro día día en donde vallemos todo esta contaminado y con un entorno saludable ubiece menos contaminación y con esta carta Ottawa ayudaría no tanto al país si no al mundo en un futuro.
ResponderEliminarEs muy interesante está carta, ya que se desarrollo para promocionar la salud. Siento que se debe aplicar más la promoción en nuestro sistema de salud, para así poder evitar un sin número de enfermedades que son prevenibles. En la actualidad observamos mucho déficit en la conscientización de estilo de vida saludable, es por ello que mediante la promoción podemos mejorar la calidad de vida del ser humano y así poder revertir los daños que se ocasionan.
ResponderEliminarMuy importante este artículo ya que la salud pública está orientada a la protección, promoción y recuperación de la salud de la población con la participación de las organizaciones de las comunidades y así, prevenir las enfermedades y que las personas tengan una mejor calidad de vida saludable y satisfacer sus necesidades.
ResponderEliminarEste artículo me parece muy bueno e interesante porque a mi punto de visto nos orienta bastante
ResponderEliminarMuy buena la información, y también el hecho de que nos inspira a abogar por mejores movimientos de salud y equidad para todos... Una lucha por mejoramiento en la salud e igualdad para todos no estaría nada mal.
ResponderEliminarEste artículo me parece excelente y muy interesante,y a mi parecer es lo que se necesita para mejorar la calidad de salud.
ResponderEliminarMe parece muy interezante este articulo ya que nos mantiene actualizados en un tan importante tema como lo es la salud en la sociedad y como se trabaja para que cada dia el servicio sea mejor para cada uno de nosotros.
ResponderEliminarDesde mi punto de vista Me parece un articulo muy interesante e importante para la vida de las petsonas.
ResponderEliminarLicenciada el artículo está muy interesante ya que estoy seguro que muchos al igual que yo estamos conociendo sobre la carta de ottawa y como esta ha tenido gran Infuencia en la promoción de la salud.
ResponderEliminarYa que gracias a la iniciativa y puntos importantes de los que tratan en esta carta los servicios de salud han sido mejor desorientados, buscando así las mejora en la vida y salud de cada ciudadano en el país que ha adoptado esta guía como lo es la carta de ottawa .